Francisco L. Urquizo: La necesidad de la escritura, sí; pero no todo es arte literario

En ocasiones, al crear sus obras, los escritores intentan borrarse, desaparecer o parecer otros; que sus huellas no se noten, que su paso por la página en blanco sea como el del extranjero, al que todos los lugares pertenecen, pero de los que de igual manera se aleja. En el caso de la escritura de Francisco L. Urquizo (1891-1969) no es así. Las pesadas pisadas autobiográficas recorren sus textos de tal manera que Antonio Castro Leal afirma en el prólogo a Tropa vieja que “es difícil discernir si la obra cae dentro de la literatura narrativa o de la crónica histórica” [1] . En Fui soldado de levita de esos de caballería (1967) se percibe de manera clara esta ambigüedad. Desiderio González, el narrador, es un militar veterano, viejo y pobre, según él mismo nos cuenta, que se impone el derecho y la obligación de dar a conocer cuanto supo de la Revolución Mexicana. Las anécdotas sobre la vida cotidi...